Eficiente: sistema de propulsión y suspensión
La plataforma modular de electrificación (MEB) ofrece una amplia gama de sistemas de propulsión y niveles de potencia. El Audi Q4 Sportback e-tron concept está equipado con La versión de alto rendimiento. En cada uno de los dos ejes hay un motor eléctrico y, por tanto, este Q4 Sportback tiene tracción quattro. No hay ninguna conexión mecánica entre los ejes. En su lugar, un control electrónico asegura que la distribución del par se coordine siempre de forma óptima, en fracciones de segundo. Eso permite que el SUV Coupé logre una tracción óptima en todas las condiciones climáticas y en cualquier tipo de superficie.
Para lograr una eficiencia máxima, en la mayoría de los casos el Q4 Sportback e-tron concept utiliza principalmente la propulsión trasera, con un motor síncrono de imanes permanentes. También por razones de ahorro, el eje trasero generalmente ejerce un mayor par de impulso.
Si el conductor requiere más potencia de la que puede suministrar el motor eléctrico trasero, la tracción eléctrica a las cuatro ruedas utiliza el motor asíncrono delantero para redistribuir el par según sea necesario. En condiciones adversas, como en una carretera helada, al tomar una curva rápida o si el auto subvira o sobrevira, esto también sucede de forma predictiva incluso antes de que se produzca el deslizamiento.
El motor eléctrico de la parte trasera tiene 204 CV (150 kW) de potencia y 310 Nm; el motor delantero suministra a las ruedas hasta 102 CV (75 kW) y 150 Nm. La potencia total del sistema alcanza los 306 CV (225 kW). La batería en el piso del vehículo almacena 82 kWh, lo que permite un alcance de más de 450 km, de acuerdo con el estándar WLTP. Se carga con un máximo de 125 kW. Por lo tanto, en poco más de 30 minutos alcanza el 80 por ciento de la capacidad total.
Sin embargo, la receta de este excelente alcance implica mucho más que una simple unidad de almacenamiento de energía con una gran capacidad. Al igual que el primer miembro de la familia, el Audi Q4 e-tron concept, el Audi Q4 Sportback también se destaca por su eficiencia, empezando por la baja resistencia aerodinámica de la carrocería: su coeficiente de penetración es 0.26, es decir, 0.01 por debajo del SUV Q4 e-tron. La serie de modelos eléctricos compactos también cuenta con una avanzada estrategia de recuperación de energía, que aprovecha cualquier posibilidad para optimizar su alcance. También contribuye a esto la sofisticada gestión térmica del motor y la batería, que incluye una bomba de calor de CO2.